domingo, 13 de mayo de 2018

06/05/2018 3era clase





Introducción 

A modo de deconstruir, reconstruir y construir la información acontecida en la clase del 06/05/2018 en Tecnología de la información y la comunicación, realizaremos un recorrido de los temas dados haciendo eje principalmente en: la historicidad de la comunicación, sus relaciones con los distintos factores (económicos, sociales, tecnológicos, históricos, culturales y políticos) y su adaptación con el sistema educativo. Este retomado desde un contexto encauzado por diversas interacciones, acotaciones e informaciones a modo de reunir mayor comprensión sobre las sociedades de la comunicación. 


Desarrollo de la clase 

Texto "Tendencias en educación en la sociedad de las tecnologías de la información" 
de Jordi Adell. 
Sobre el autor 


Jordi Adell Segura, es licenciado en filosofía y ciencias de la educación graduado en la universidad de Valencia.

Actualmente es profesor titular universitario del área de didáctica y organización escolar en el departamento de educación de la universidad Jaume I de Castellón. 

Su actividad docente está relacionada con las nuevas tecnologías de la información y la comunicación aplicadas a la educación en las diplomaturas de Maestro y la Licenciatura en Psicopedagogía. 

También dirige el Centro de Educación y Nuevas Tecnologías (CENT) de la misma universidad, un centro dedicado a la mejora de la calidad de la enseñanza y el aprendizaje universitarios mediante el uso de las nuevas tecnologías. En su opinión, el futuro pasa por ser más móvil, más social y más colaborativo. En este sentido aprender “es sinónimo de crear y compartir formando parte de redes educativas”. Conceptos que forman parte de nuevas formas de evaluación que ya están en funcionamiento. 

En su opinión, el futuro pasa por ser más móvil, más social y más colaborativo. En este sentido aprender “es sinónimo de crear y compartir formando parte de redes educativas”. Conceptos que forman parte de nuevas formas de evaluación que ya están en funcionamiento. 


Sobre el texto 

A modo de síntesis 

El texto nos habla de las distintas evoluciones o revoluciones que provocaron las distintas invenciones de las tecnologías a través de la historia. 

Sin embargo, el enfoque que realmente le interesa reflexionar al autor es cómo impactan las mismas en nuestra sociedad, y sobre todo en la educación. Cual es nuestro papel ante esta evolución de las tecnologías y su imprescindible importancia, no solo desde el lugar fáctico de "herramientas" sino como una gran revolución de las sociedades las cuales contribuyen al desarrollo constante de las mismas.

Respecto a esto, el autor destaca las cuales considera las cuatro revoluciones de las tecnologías que repercuten intensamente en nuestra sociedad. Entre ellas: oralidad, escritura, imprenta y desarrollo de los medios digitales. Pero, ¿que es una revolución? Una revolución es un cambio radical, profundo y permanente, respecto del orden establecido preexistentemente. Por lo tanto, es en este contexto tecnológico, una invención significativa superior a la antecedida que aporta mayores contribuciones, herramientas, formas de pensar, etc, con las cuales las personas podrán resolver sus necesidades de manera más eficiente, relacionarse de manera diferente, etc. 


La evolución de las tecnologías de la información y la comunicación 

Los cambios tecnológicos dieron lugar a cambios radicales en la organización del conocimiento, en las prácticas y formas de organización social, en la propia cognición humana, esencialmente en la subjetividad y la formación de la identidad. 

Si remitimos este análisis a una perspectiva histórica es posible realizar una interpretación que demuestre las transformaciones que hemos y estamos viviendo en nuestro tiempo. 


I Surge el lenguaje oral 

La invención del lenguaje oral, es decir, la codificación del pensamiento mediante sonidos producidos por las cuerdas bucales y la laringe fue, sin duda, un hecho revolucionario, proporcionando una nueva dimensión a la interacción humana que brindaba un medio a las personas para imponer una estructura de pensamiento y transmitirlo a otros. 
Sin embargo, una dificultad que imponía es su relación intrínsecamente (1) relacionada con el tiempo. Es decir, la palabra existe sólo mientras es pronunciada y en la memoria de los oyentes.

En síntesis, este tipo de cultura se caracteriza por ser aditiva y agregativa más que analítica, redundante, tradicionalista, centrada en la vida cotidiana y participativa, y situacional, más que abstracta.


II Surgimiento de la escritura 

La segunda gran revolución fue producto de la creación de signos gráficos para registrar el habla permitiendo un nivel de abstracción (2) y preservación temporal y espacial para la posteridad, más allá de los límites biológicos: la escritura. 

Sin embargo, la palabra escrita tenía algunos inconvenientes: era lenta en relación a la rapidez del lenguaje hablado, su audiencia era menor y, en definitiva, era un medio mucho menos interactivo de comunicación que el habla. 

La difusión de la escritura no fue rápida ni generalizada, ya que su acceso se encontraba restringido para unos pocos, a unos "especialistas": los escribas (3) . En las culturas orales, el aprendizaje era fruto de la experiencia en las actividades de la vida cotidiana. 

La aparición de la escritura impone la descontextualización o disociación entre las actividades de enseñanza/aprendizaje y las actividades de la vida diaria, objetivando el conocimiento. 


III La imprenta 

La tercera revolución se debió a la aparición de la imprenta. A la cual algunos autores la consideran un simple desarrollo de la segunda fase. 

La imprenta significó la posibilidad de producir y distribuir textos en masa, restaurando en parte la interactividad del habla, perdida en el texto manuscrito. La posibilidad de reproducir textos en grandes cantidades tuvo una influencia decisiva en el conjunto de transformación políticas, económicas y sociales que han configurado la modernidad y el mundo tal como es ahora. 

Un ejemplo a analizar es la posición de las bibliotecas anteriormente a la aparición de la imprenta. Cuando las primeras Universidades aparecen se encuentran también en ellas las primeras bibliotecas universitarias, hacia el S. XII-XIII. Aunque la enseñanza se basaba en la memoria, los estudiantes y profesores disponían de bibliotecas para consultar las obras. 

Las bibliotecas se encontraban controladas por "estacionarios" una especie de librero que disponía todas las obras que se necesitaban en las universidades, debidamente aprobadas por la autoridad académica, en general, procedían de donaciones o legados.

Tenían dos secciones, la magna, con los libros de consulta encadenados (tal era su valor) y la parva, libros que se prestaban depositando en fianza otro libro por tiempo limitado. Su actividad se regulaba en las "Constituciones" y consistía en disponer de “copias autorizadas”4 de las obras, divididas en cuadernos, que prestaban a los estudiantes para que éstos los copiaran o los hicieran copiar y luego volvían a recuperarlos.

La imprenta contribuyó a una auténtica revolución en la difusión del conocimiento y de las ideas y, por tanto, en la evolución de nuestros sistemas políticos, la religión, la economía y prácticamente todos los aspectos de nuestra sociedad.  



IV Los medios digitales 

La cuarta revolución, se encuentra inmersa en nuestra generación, es la de los medios electrónicos y la digitalización, un nuevo código más abstracto y artificial.

Se sitúa el origen de esta nueva etapa en una fecha concreta: el 24 de mayo de 1844, cuando Samuel Morse envió el primer mensaje por telégrafo. Por primera vez la información viajaba más rápido que su portador, ahora viajaba a la velocidad de la luz. Por aquella época, Charles Babbage, un ingeniero inglés, trabajaba ya en su máquina analítica, el primer ordenador digital.

En este proceso de digitalización del saber hemos asistido a una “fase preliminar” (5) en la que  la electrónica ha propiciado el rápido desarrollo de aplicaciones analógicas (el teléfono, la radio, la televisión, el fax, etc.), que en la actualidad están migrando rápidamente hacia la digitalización y adquiriendo capacidades interactivas entre emisor y receptor y de procesamiento y manipulación de la información ampliadas. 

No sólo tenemos textos, imágenes y sonidos digitalizados que podemos almacenar y reproducir indefinidamente de modo fiel, sino que también podemos producirlos desde la nada, generarlos a voluntad. Han aparecido nuevos tipos de materiales: multimedia, hipermedia, simulaciones, documentos dinámicos producto de consultas a bases de datos, etc.

Los satélites de comunicaciones y las redes terrestres de alta capacidad permiten enviar y recibir información desde cualquier lugar de la Tierra.

La mayoría de las explicaciones sobre la evolución de las tecnologías padecen un fuerte “determinismo tecnológico” . Es decir, con frecuencia olvidamos que una tecnología no sólo 6 tiene implicaciones sociales, sino que también es producto de las condiciones sociales y, sobre todo, económicas de una época y país. El contexto histórico es un factor fundamental para explicar su éxito o fracaso frente a tecnologías rivales y las condiciones de su generalización. La sociedad actúa como propulsor decisivo no sólo de la innovación sino de la difusión y generalización de la tecnología. “el cambio tecnológico tan sólo puede ser comprendido en el contexto de la estructura social dentro de la cual ocurre”. 

Lo que está pasando ahora mismo en la Internet, la explosión de contenidos comerciales o las batallas por controlar el mercado del software, no son precisamente un producto de la tecnología. Las características de los protocolos de comunicación utilizados en la Internet son una creación humana deudora de las necesidades percibidas por los investigadores y las instituciones que financian e impulsan la investigación. En resumen, todos estos avances tecnológicos tienen lugar dentro de un determinado marco socio-económico que hace posible no solo su desarrollo en los centros de investigación y Universidades, sino también su transferencia a la sociedad y su aplicación a la producción. La revolución tecnológica en los medios, canales y soportes de la información que se está produciendo se puede englobar en un conjunto más amplio de cambios en la estructura productiva de nuestra sociedad. Un término define este conjunto de transformaciones: la sociedad de la información 



Para comprender más 

Después de este análisis exhaustivo de parte de Jordi Adell procederé a analizar las siguientes preguntas para un mejor entendimiento. ¿Cual es su idea principal? y ¿por que él considera importante reconocer históricamente estas revoluciones?, ¿por qué revolucionó la sociedad?

Para responder a estas incógnitas comenzaré por utilizar otra pregunta ¿cómo sería posible la comunicación sin un medio para hacerlo? su respuesta es simple, no es posible. Por tanto ¿por qué revolucionaria la sociedad? por las diversas necesidades del hombre de comunicarse, de relacionarse. Pero, ¿por qué el autor explica estas revoluciones en un cronograma lineal de tiempo? simplemente para comprender a las mismas como revoluciones, para no reconocer a las mismas como un determinismo tecnológico sino comprender que cada revolución se encuentra influenciada por diversos factores (económicos, políticos, históricos, culturales, sociales), para reconocer el impacto y no invisibilizar el desarrollo, para comprender que nuestra generación se encuentra inmersa en este mismo momento en la sociedad de la información, aporte que aborda enfocado sobre todo en el uso escolar de las mismas. 

Estas herramientas que nos constituye como producto y productores de esta tecnología (dado que es la sociedad misma la que se encarga de desarrollarlas) amplían de manera estrecha el bagaje de medios, espacios y relaciones en el entorno educativo. Sin embargo, como futuros docentes la idea no está en ver a estos distintos medios como simples herramientas que brindan una forma más llamativa de llegar a los chicos, o bien formarnos en algún curso de informática. Es decir, lo que se busca es que los docentes se formen en la comprensión y el abordaje de estos nuevos tic's pero para poder introducir este mundo al aula. Esto constaría de un análisis previo del contexto, su área, y sus alumnos, para poder utilizar herramientas que sirvan para llevar estos medios a clase.

Un beneficio de utilizar los tics en el aula es que progresivamente cada vez más softwares proveen una interfaz que brindan una plataforma de trabajo cooperativo, sin perder de vista el trabajo individual cognitivo del alumno, tal es el ejemplo de Padlet. 


Comunicación y colaboración digital

 "Muro de construcción colaborativa"  


Padlet es un recurso online, o en “la nube”, que permite crear un muro en el que pueden incorporarse vídeos, imágenes y archivos de texto. A nivel didáctico es un recurso útil para presentar una síntesis de materiales a utilizar en una consigna dada a los alumnos, ya que Padlet es como un pizarrón en el que “pegamos” esos materiales. Puede utilizarse tanto para proponer actividades en el aula, si se dispone de una buena conexión a Internet, compartiendo el enlace del muro creado; como así también en educación virtual, ya que se puede incrustar el Padlet en cualquier entorno virtual (aula virtual, blog, redes sociales). 


¿En qué se basa el aprendizaje colaborativo? 

El aprendizaje colaborativo entiende al aprendizaje como un proceso social de construcción del conocimiento (más allá de la instancia individual de análisis, conceptualización y apropiación), como la necesidad de compartir el conocimiento para lograr una meta que trascienda las posibilidades individuales. Es decir que hay un aprovechamiento de este tipo de aprendizaje en función de las facilidades que brindan las nuevas tecnologías. 


Crear un muro interactivo para compartir 

Comenzaremos entrando a la pagina oficial https://es.padlet.com/ donde nos registraremos, lo cual nos permitirá si queremos ir almacenando todos los muros que vayamos a crear y también personalizar nuestro proyecto.

Una vez hecho, hacemos clic en "crear un muro" y nos llevará a una nueva pantalla donde aparecerá el "estilo" donde podremos elegir nuestro espacio de trabajo.

La forma de añadir contenido a Padlet es muy sencillo. Por un lado podemos simplemente arrastrar contenido desde nuestro equipo al espacio de trabajo. Por otro lado podemos hacer doble click sobre ese espacio de trabajo o muro y se nos creará una nota.

En la nota podremos escribir el nombre del autor (recomendado si van a existir varios colaboradores en un mismo muro), la descripción de la nota, adjuntar una imagen, enlazar un link web o tomar una fotografía.Podremos agregar todas las notas que queramos, y cuando lo
creamos oportuno, haremos click en ‘compartir’. De esta forma, será posible convertir nuestro espacio de trabajo en formato de imagen, enviarlo a través de redes sociales, e-mail o incrustarlo en sitios web.